0299/2023
• Utilizan
el maíz como ingrediente culinario.
• Figuran
los de salsa verde, mole, dulce, frijol y de sal, entre otros.
Toluca,
Estado de México, 2 de febrero de 2023. El
padrón del Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías del Estado de
México (IIFAEM), de la Secretaría de Cultura y Turismo, cuenta con registro de
250 artesanas y artesanos dedicados a la cocina tradicional mexiquense.
Su labor
comienza desde la siembra del maíz hasta la preparación culinaria para deleite
de las y los habitantes de los 125 municipios del Edoméx; además, los sabores y
saberes son vastos, ya que se han conservado los métodos de cultivo,
nixtamalización, fermentación y se ha perpetuado la utilización de utensilios
como metates, cazuelas, palas de madera y morteros de piedra, garantizando que
la herencia gastronómica permanezca vigente hasta nuestros días.
Un ejemplo de
ello son la variedad de tamales que se elaboran dentro del territorio estatal,
este manjar proviene del vocablo “Tamalli”, que significa “envuelto” en náhuatl
y dependiendo la región, es su preparación.
Por ejemplo, en
la cuenca del río Lerma aún conservan alimentos prehispánicos envueltos en hoja
de maíz para la elaboración de tamales de charales, pescado y ranas, que son
acompañados de manteca, chiles, jitomate y epazote, asados en el fogón.
Por otra parte,
en la mayoría de los municipios los tamales se envuelven con hoja de maíz y son
los ya conocidos de chile verde, chile rojo y mole, que van acompañados de
carne de pollo, puerco e incluso con hongos y flores de calabaza.
Los tamales de
rajas son elaborados con chiles, cebollas y queso, o los que solamente tienen
relleno de frijoles, haba o sal, se comen a manera de tortilla, acompañados de
un mole rojo u otro guiso.
También hay
tamales dulces como los de piña, guayaba o elote que llevan mantequilla. Otro
típico tamal que se hace en temporada es el de fruta de capulín, es un
delicioso postre y su preparación se basa principalmente en capulines frescos,
piloncillo, azúcar y canela.
Sin dejar pasar
los tamales de sesos que son preparados con cebolla, chiles manzanos y epazote,
a veces aderezados con hígado.
Los municipios
que destacan en su preparación son Amoloya de Alquisiras, Lerma, Xonacatlán,
Otzolotepec, Tepetlaxtoc, Ixtlahuaca, Temoaya, Ocoyoacac, Capulhuac, Xalatlaco,
Tonatico, Tianguistenco y Malinalco.
Este platillo
era cocinado de forma comunitaria para celebrar grandes fiestas religiosas,
como el agradecimiento por la fertilidad de la Tierra, ofrenda a los muertos y
diversos eventos sociales.
Actualmente, se
estima que existen más de 500 recetas de tamales en México, de las cuales
surgen más de 4 mil diferentes preparaciones y todas cambian de acuerdo con las
tradiciones de cada región y las costumbres familiares.
En la entidad
destaca el tamal de ollita, típico del municipio de Ocoyoacac, para prepararlos
es necesario moldear la masa a modo de olla de barro, después se rellena con
carne y salsa, se envuelven en totomoxtle (hoja de maíz seca) y se cuecen al
vapor.
Así, los tamales
son uno de los platillos típicos más emblemáticos dentro de la gastronomía
mexiquense y forman parte de una de las festividades más importantes del año,
como lo es el Día de la Candelaria, donde los hogares mexiquenses se reúnen y
con un café, chocolate o champurrado degustan esta receta ancestral.